miércoles, 18 de febrero de 2009

feliz año nuevo_hoy empieza todo

He querido condensar mis mejores deseos para este año 2009 en la palabra DEMOCRACIA. Mi "feliz año nuevo" es un tarjetón con esta palabra troquelada. Propongo con ello un juego colectivo. Es posible proyectar DEMOCRACIA en todo aquello que deseemos, jugar con la palabra y el sol como con un trocito de vidrio y hacerlo visible, una fotografía, un vídeo, una sensación, una sonrisa, un retrato, una palabra. Podéis recoger vuestro tarjetón en El Astronauta. Espero ilusionada vuestras sensaciones. Una serie puede verse aquí.
Esta idea servirá de punto de partida en el taller que coordino por encargo del Consejo Municipal de las Mujeres de Córdoba sobre "Urbanismo, vivienda y transporte" dentro de las jornadas de participación organizadas por la Delegación de Igualdad. Se proponen cinco microtalleres creativos en torno a la vivencia de la ciudad como modo de generar público, público crítico que trascienda la opinión hacia la acción; el público no como mero consumidor sino como productor de significados. Más en CIUDAD TÁNDEM
La imagen que acompaña este texto es de Lola Araque, resultado de un día de trabajo conjunto en el archivo del Congreso de los Diputados, gracias a la amable colaboración de la Comisión de Igualdad presidida por Carmen Calvo. Se trata de la primera hoja de un libro de firmas de mujeres agradeciendo a las Cortes Constituyentes la concesión de todos los derechos civiles y políticos, entre ellos el voto, en diciembre de 1931. La primera firma es de María Martínez Sierra.

Eulália Valldosera_dependencias

En su recorrido Eulália Valldosera ha planteado desde los primeros años noventa la negación del objeto de arte como producción para el consumo otorgando en su trabajo evidente primacía a la acción. Su intención no es crear un objeto para ser observado, sino hacernos partícipes de una acción que pueda ser recordada, como un flujo de información que se introduce en nuestra memoria y forma parte de nuestra propia vida, incidiendo en esos actos cotidianos y en los residuos de nuestro paso que actúan como prolongaciones del cuerpo. (Nuria Enguita Mayo)
En Dependencias 2009, una instalación realizada expresamente para esta muestra del MNCARS abierta del 4 de febrero hasta el 20 de abril de 2009, Valldosera pone en nuestras manos un carrito de la compra cargado con proyectores de vídeo. La obra toma vida cuando comenzamos a empujar el carrito, avanzamos, retrocedemos, nos detenemos, saludamos a nuestra sombra proyectada sobre las imágenes recogidas por Valldosera en un supermercado, en una terminal de aeropuerto y en un museo. Nuestra sombra se hace una, se solidariza rápidamente, con el movimiento que genera la conciencia del estar vivo, estar y ser, aquí y ahora. Otros tres carritos más interactúan con el chorro de luz y experiencias que sale del nuestro, una proyección en travelling que se emancipa de la autora para acogerse a nuestro ritmo vital, a nuestra percepción, a nuestra curiosidad y nuestro deseo. Un regalo experimental. Un juego muy serio que hábilmente nos remite a las cargas que arrastramos, que nos acompañan o nos lastran la existencia, la experiencia y, sobre todo, nuestro modo de relacionarnos con los demás.
Dependencias da nombre a toda la muestra y hace referencia también a las estancias en las que ésta se desarrolla, a la sucesión de contenedores de experiencias que aspiran a explorar nuestra psicología de la percepción. Botellas interactivas (Forever Living Products nº3) pretender sacudir nuestros sentidos, pesan o suenan, alojan en su interior un ojo mágico, conversaciones privadas, confesiones íntimas, testimonios de experiencias para terminar proponiéndonos el juego más arriesgado, una botella de Fairy que nos habla y nos propone: Te doy la bienvenida a mi espacio. Estoy capacitada para borrar, para eliminar todo aquello que deseas olvidar. Si me lo cuentas, lo guardaré en mi interior y en pocos días habrá desaparecido de mi espacio para siempre y del tuyo también. Entonces tienes que decidirte, interactuar con la botella de Fairy pegada a la oreja y decir en voz alta exactamente lo que estás pensando. O callar. Pulsé el botón y hablé. Un alivio.
Los sólidos puentes con lo cotidiano y la experiencia doméstica vital que tiende Valldosera se traducen en frágilísimas escenografías de luz, liquidos y fluidos, objetos comunes, que permiten afianzar una empatía, un efecto envolvente, una simpatía hacia nuestra propia experiencia, nuestra posición en el mundo y nuestra relación con el otro.